Con una propuesta ‘fantasma’ cerró convocatoria para dragado en el puerto
El canal no resistió la demora y ahora la supuesta solución fue presentada sin cumplir los requisitos exigidos.
Con una típica propuesta ‘fantasma’ concluyó este lunes el cierre de la convocatoria abierta por el Patrimonio Autónomo Findeter - Cormagdalena, para contratar el dragado de mantenimiento en el canal de acceso al puerto de Barranquilla.
Lo anterior se desprende del acta de cierre que estuvo a cargo de Ángela María Pérez y Jeison Jair Franco, en representación del Patrimonio Autónomo que también es administrado por BBVA Fiduciaria.
“Al correo electrónico del Patrimonio Autónomo Cormagdalena 2021, la sociedad Dutch Dredging SAS, remitIó dos documentos denominados LOT 1 y LOT 2, ambos en idioma inglés, sin traducción oficial, y en los cuales no se evidencian los formatos solicitados en los términos de referencia, como carta de presentación de la oferta, formato de presentación de la oferta económica, de igual manera, ninguno de los documentos cuenta con cifrado”, precisa dicha acta.
Claramente al no reunir los requisitos establecidos en los términos de referencia, por parte del único proponente, la convocatoria nuevamente sería declarada desierta. La tercera de manera consecutiva en lo que va del año. Otro fracaso portuario de quienes manejan el tema, como Findeter y Cormagdalena.
Con el agravante de que el canal de acceso urge del dragado y ahora el mantenimiento es cada vez más incierto, en momentos en que, tras lo realizado por la compañía European Dredging Company Sucursal Colombia (EDC), con la draga ‘Bartolomeu Dias’, no dio los resultados esperados, al punto que hoy la Dimar, a través de la Capitanía de Puerto, determinó un bajón de calado, por las deficiencias en las profundidades y la creciente sedimentación, especialmente en el sector de Bocas de Ceniza, tal como lo advirtio Zona Cero en el informe publicado en el fin de semana.
Es decir, el canal no resistió la ausencia de calado y menos ahora cuando no se sabe que pasará.
Así las cosas, lo que se evidencia, una vez más, es la falta de capacidad de Findeter y, fundamentalmente Cormagdalena, para solucionar la emergencia portuaria, que incluye buques encallados y desviados por falta de calado.